A VENDIMIAR

Como todos los años, por estas fechas comienza la vendimia, que dependiendo de los sitios se realiza de una manera u otra pero siempre el objetivo es el mismo, la recolección de las uvas maduradas durante el verano y su conversión en el vino que acompañará en la mesa a los mas variados manjares de las  mesas del mundo.

Ni que decir tiene que la vendimia, como casi todas las cosas, ha sufrido muchas y variadas transformaciones, pues desde la racolección de la uva hasta la elaboración y envasado de su fruto e incluso en su consumo hay notables diferencias con lo que se hacía antaño.
Los primeros recuerdos que yo tengo de la vendimia, cuando apenas era un niño, son un un poco difusos, pero sí que me acuerdo de que por ejemplo, la uva se transportaba de la viña a la bodega en unos recipientes de madera de forma de pirámide truncada invertida y que una vez llenos había que manejar entre varios vendimiadores y aún así costaba un sobre esfuerzo cargarlos en los carros de mulas, bueyes o vacas, en cuyos vehículos se transportaba.
Los recuerdos mas nítidos son de los recipietnes metálicos, bidones cilíndricos más bién, que de igual manera eran dificultosos de manejar pues quizá su capacidad excediera a las de madera con su consiguiente aumento de peso.

Años después, sobre mediados los 60, aparecieron los recipientes de goma, tambien llamados "conos" en el argot, por su apariecia cónica truncada con lo estrecho hacia abajo, con asas para su agarre y una mejor manejabilidad amén de una duración mas larga y mayor facilidad para su limpieza y mantenimiento.Todavia hoy en dia se utilizan en algunos casos si bién casi en la mayoría se han desechado y en aras de una mejor funcionalidad la uva se vuelca directamente en los remolques de los tractores que hace muchos años que sustituyeron a los animales de carga, estos remolque vuelcan directamente en la tolva que recoge el fruto que va a caer en la trituradora.

De esta manera de aquellos pesados recipientes de madera hemos pasado a la comodidad del vuelco  de una gran cantidad recolectada en pequeños capachos yvolcados en el remolque.
Si el transporte ha variado, tambien lo ha hecho de algún modo la recolección, no mucho pero algo si ha cambiado.
De las veces que yo fui a vendimiar, no muchas por cierto, recuerdo que había que estar a la amanecida del dia, ya en la viña para aprovechar "la fresca" de la mañana pues en esas horas era cuando más cundía "el corte" pues con las calores del sol en alto, primero. era mas fatigoso el trabajo y segundo la uva fermentaba com el calor y podía estropear el mosto, además como entonces casi no existían los medios mecánicos la uva era pisada en la bodega por los propios vendimiadores despues de la corta del día.A propósito de la corta esta se hacia con todo tipo de útiles cortantes pero era mayoritario el uso del "tranchete", una herramieta con la punta curva y un mango grueso y de gran corte con el que había que tener cuidado de no rebanarse algun dedo al cortar los racimos de de la cepa; hoy se utilizan unas tijeras que son menos peligrosas pero los viejos vendimiadores prefieren "el tranchete"
Como la tecnología avanza ya están aquí las máquinas vendimiadoras que suplen la mano de obra y que convierten las semanas de las cuadrillas de vendimiadores en meras horas de funcionamiento de la susodicha máquina y que solo requiere un poco más de inversión a la hora de plantar el viñedo pero que compensa al que se decide por este sistema. De esta manera cada vez hacen falta menos vendimiadores y lo que significó fuente de ingresos para muchas familias, no solo de aqui sino de otros pueblos, hoy se ha quedado en nada y ven como se escapa ese jornal que ayudaba a pasar el crudo invierno.
Aquella trabajosa vendimia, porque hay trabajos duros en el campo pero como la vendimia creo que ninguno, porque.... malo si hace calor, pero con lluvia..... y con frio..., como decía, aquel penoso trabajo ya casi existe y hemos cambiado lo confortable por lo carente con lo que eso conlleva pero no importa , seremos capaces de inventar algo que nos permita seguir hacia adelante pero eso si tiene que ser que cada vez reduzca mas el esfuerzo.
Como es lógico ya no se ven esas cuadrillas de vendimiadores  de madrugada montados en los remolques de los tractores.Ya no nos despiertan con su cháchara matutina camino del corte cuando en bicicleta, borrico o mula enfilaban los caminos de "La Aceña", "El Alamillo o Cantorral  y tantas otras viñas repartidas por "La jurición" como aquí se le llama al término municipal.
Ni se ven esos "almuezos" cuando a media mañana se hacía un alto para reponer fuerzas y cada uno llevaba en su "merienda"lo que podía, que hace años era mas bien poco, algún torrezno, un par de sardinas saladas o un trozo de bacalao,  que tambien los habia, y se remataba con un buen racimo de uvas de acompañamiento y unos cuantos tragos a la bota. De ahí salió el refran de :<<Eres mas tonto que Abundio que fue a vendimiar y llevó uvas de merienda>>.
Otro dia contare como se hacia el vino en las casas, porque aunque no tuviesen viñas, había muchas casa que fabricaban su propio vino.

   ALHAMAR