De unos años a esta parte, creo que desde que terminamos la universidad, ¿¿¿, (ahora lo explicaré), como decía desde hace 4 ó 5 años pasado el verano y antes de que el tiempo empeore nos reunimos unos cuantos amigos cuya amistad se inició en la universidad.
No, no es que nos conociéramos y luego durante muchos años no nos hayamos visto, no es eso, lo que ocurre es que hasta que a la edad madura no concurrimos a la universidad, no nos conocíamos y digo edad madura, porque en la época en el que generalmente se suele acudir a las facultades nosotros estábamos ocupados en otros menesteres, ninguno de nosotros tiene carrera universitaria, aunque sí es cierto que conocimientos y experiencia en las más variadas materias no faltan también es verdad algún maestro ya jubilado pero nuestras profesiones son tan dispares como de ama de casa a representante de pan Bimbo, oficinista, comercial, electricista, etc. naturalmente todos jubilados pero no exentos de inquietudes y deseos de iniciar y conocer nuevas experiencias.
Por eso nos conocimos todos en la universidad en unos cursos que la universidad Rey Juan Carlos junto con la Consejeria de Familia y Asuntos Sociales de la Comunidad de Madrid y la colaboración de las Corporaciones Locales de Móstoles y Madrid, pusieron en marcha lo que Universidad de Mayores, destinado a personas mayores de 55 años, jubiladas o no, cuyo único requisito era asistir a clase la mayor cantidad de horas de clase posibles.
No voy a entrar en valoraciones de las asignaturas, impartidas por los propios catedráticos de la universidad, que iban desde la Historia de España actual a otras como Física Elemental o Medio Ambiente.
El ciclo universitario duró 3 años en los cuales yo personalmente disfruté enormemente asistiendo a clase y participando de nuevas fuentes de conocimiento explicadas de forma sencilla y en un ambiente de extraordinaria camaradería universitaria trasladada a personas no solo de 55 años sino a algunas de mas de 80 que sin haber conocido mas que la escuela primaria eran capaces de desarrollar teorías de mucho conocimiento y estudio, verdaderas enciclopedias andantes en busca de más saber.
Fue en esos años cuando entablamos esa amistad que une a las personas no importa como sino porque hay algo afín que les incita a relacionarse y se sienten contentas cada vez que se reunen y charlan de sus cosas de los nietos, ¿porque no? de sus dolores y de sus inquietudes, el caso es sentirse vivos no vale con estarlo hay que sentirse vivo y se esta vivo y despierto cuando Bartolomé a sus años y sin nociones de música se atreve con el OBOE, o Matamala (más de70) con sus marchas de senderismo (Camino de Santiago incluido) Manolo, sus trabajos de marquetería y sus cursos de informática y su dedicación a la coral, a Ramón, le encanta viajar y conocer nuevas gentes, Fany, viaje y fotografía sus principales vivencias, Jose Manuel quizá el más intelectual de todos su coro y su dedicación a la lectura, Montse, mi mujer, dedica su tiempo, dos días a la semana a ayudar a los mas necesitados y desde Cáritas de Villa del Prado coordina recogida de todo tipo de ayuda y su reparto a quienes lo necesitan. Mi modesta inquietud se limita a mi afición a la lectura y la escritura así como a los diferentes guisos y comidas para la familia y para los amigos que como el pasado sábado nos reunimos ante un soberbio (mal está decirlo) cocido que les preparé con todo el cariño del mundo.
Comentando con alguien que venían unos amigos de la universidad a comer, me dijo: ¿¡y eran buenos alumnos!? ; buenos alumnos no se pero buena gente lo es un rato, ¡ah! y sus respectivas parejas el que la tiene, porque ellas también forman parte del grupo.
Un buen sábado en fin que a pesar de las limitaciones que la edad impone,( azúcar, colesterol etc) pasamos en el arrullo que da un buen cocido hecho al amor de la lumbre de leña.
Cada cosa para su cosa, la verdura en un recipiente, la carne con los garbanzos en otro, el agua para añadir en otro y el de la sopa otro, los demás son meros accesorios.
Salió redondo y otro día diré como lo hago yo
ALHAMAR
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